De otro tipo

Ahora viene la resaca más dura, la más jodida, la de los sentimientos. Un vacío extraño. Te ponen a saltar la comba, van subiendo el ritmo, saltas como una loca y cuando parece que has cogido la cadencia....recogen la cuerda y adios muy buenas. Y eso no es lo peor. Lo peor es la duda, me quedo esperando a que vuelvan? me voy a descansar?

Pero joder, lo que yo quiero es saltar.

O mejor, lo que quiero es acercarme a ti, tirar la cuerda de tus manos y besarte hasta que olvides todos los nombres.

Me iré despacito, por si te da por volver a jugar conmigo. Y si no quieres jugar, ya sabes, mueve las orejas y hablamos en serio.

Una semana de música

Una semana de música que empiezo a digerir ahora. Tras la comentada Bebe, llegó Extremoduro el jueves. Un sueño de adolescente, la verdad no los había visto en directo nunca y me hacía mucha ilusión, casi diría mucha ilu. Y qué decir de ellos? pues eso, pasaos de rosca, un poco serios con la gente que estaba allí saltando como posesos, pero a fin de cuentas es ambiente era bueno. Muy "sano". Y la música, que para eso íbamos, pues la ostia. Un directo demoledor como dirían en el heraldo.

El viernes estuve en el concierto celebración de los 25 años de radio 3. Mártires del compás, de los que conozco poco, Ojos de Brujo, como siempre Marina preciosa y provocadora de escalofríos, calentando para la estrella de la noche. Carlinhos Brown, quince personas encima del escenario, montando la de dios, mucha parafernalia cristiana (qué se le va a hacer) y con la "coisa mais linda" los pelos de punta para toda la noche, la cadera gritando socorro, de las diez a las cinco de la mañana sin parar. Un espectáculo para disfrutar.

Acabamos la crónica con el concierto de Marea el sábado. Pues sí, se parecen mucho a Extremo, pero ni con la mitad de fuerza. Vamos, que si te gusta El último de la fila, te gustará La caja de Pandora, pero wno....Lo guay, pues que es buena música y casi los tienen que despegar del escenario.

En resumen, he escuchado mucha música y afortunadamente, buena toda ella.

Presentación

Te levantas con la cabeza dentro de una burbuja, la nuca grita horizontalidad y con las pocas fuerzas que ha amanecido la llevas hasta el desayuno. Entra y te vuelve del revés. Fumas un cigarro y los pulmones te dicen que están saciados, tranquila, tengo nicotina hasta pasado mañana. Los ojos piden que te bese una princesa, a ver si así te conviertes en príncipe, por varíar. La piel luce un maravilloso tono cobrizo, apergaminado. Los pies lloran dentro de las zapatillas, quieren seguir durmiendo. Decides doparte, almax, alcazelser, vitamina C, sopa de mamá? Todo lo que sea necesario para engañarte e ignorar la visita.

Quién dijo que la mujer es más bella nada más levantarse?¿? Menuda estupidez.

Siesta, ducha y proceso de reconstrucción.

Os presento a mi resaca. Y mañana más.

- ¿Y por qué no sale sola?

- porque no le da la gana,

dice que si no se droga,

dice que no siente nada

Apertura

Concierto de Bebe. Pequeñita y aparentemente frágil, es un chorro de fuerza a pesar de los porros que llevaba en el cuerpo. La dulzura del disco se quedó ahí, enlatada. Porque lo que sonó fue mucho guitarreo, algún ramalazo de flamenquito guarro, algo de ska, bases electrónicas y hasta un country mientras imitaba a Bárbara Bush. Y te meas de risa claro. En resumen, un montón de gente saltando, sudando, bailando y con una sonrisa en la boca. Por cierto, tengo que averiguar si regalaban entradas llevando el corte de pelo de Bebe.

Razones

Te echo de menos

le digo al aire.

Te busco, te pienso, te siento

y siento que como tu no habrá nadie.

Y aquí te espero

con mi cajita de la vida

cansada, oscura, con miedo

y este frío nadie me lo quita.

Tengo razones para buscarte

Tengo necesidad de verte, de oirte, de hablarte

Tengo razones para esperarte

porque no creo que haya en el mundo

nadie más a quien ame.

Tengo razones, razones de sobra

para pedirle al viento que vuelvas

aunque sea como una sombra.

Tengo razones para no quererte olvidar

porque el trocito de felicidad

fuíste tu quien me lo dio a probar.

El aire huele a ti

Mi casa se cae porque no estás aquí.

Mis sábanas, mi pelo, mi ropa te buscan a ti.

Mis pies son como de cartón que voy arrastrando por cada rincón.

Mi cama se hace fría y gigante

y en ella me pierdo yo

Mi casa se vuelve a caer

mis flores se mueren de pena,

mis lágrimas son charquitos que caen a mis pies.

Te mando besos de agua

para que bañen tu cuerpo y tu alma.

Te mando besos de agua

pa´que curen tus heridas.

Te mando besos de agua de esos con los que tanto te reías.

Manchamanteles

¡Ay mísera de mí! ¡Ay infelice...! ¡Si ustedes supieran lo que he penado en este infame mundo! Tal parece que mi mayor pecado es haber nacido. A todos les molesta mi presencia y en cuanto me establezco en algún sitio soy de inmediato desalojada por la fuerza...Más me hubiera valido nacer lagartija, hormiga o rata, de perdida, ¡pero nunca cucaracha!

Y ya que me convirtieron en insecto ¿por qué no me dieron alas con colorcitos como a las libérulas o luz interior como a las luciérnagas? Digo, algo que me hubiera vuelto menos repulsivo mi aspecto, pues debido a él, he tenido que pasar la vida como la muñeca fea, escondida por los rincones oscuros y alimentándome únicamente de los desperdicios. Sí, no se asusten, yo como basura. Dizque porque esa es la misión que tienen las cucarachas en esta vida. ¡Patrañas! No nos ha quedado otra, ya que apenas salimos a la luz y ¡zas! recibimos un escobazo o zapatazo, o tortazo, o golpazo mortal, pues. ¿Quién les ha dicho que no nos gusta la alta cocina? ¿Los buenos vinos? ¿La buena mesa? Si nos dieran una oportunidad de actuar en sociedad, se lo demostrariamos.

Íntimas suculencias (Laura Esquivel)

Canto de sirenas

Eres como música en una caja encerrada. Abro, suenas, cierro, desapareces. Y así debe ser. Es perfecto. Es ahí donde debes estar.

Todo es mentira. Cada día me cuesta más cerrar la caja. Tu melodía retumba en mi cabeza durante horas, y suena y suena....Cada vez es más difícil tenerte encerrado ahí dentro.

Tu liberación, mi derrota. Tengo que ser fuerte. Estoy pensando en un candado, pero oh! tu música es tan dulce. Que miedo.

Espero que el frío aletargue tus notas, las vuelva cansadas y lentas. Que me de tregua. Pero más tarde volverá el sol . Y en una de esas noches calurosas no tendré miedo.

Me ataré fuerte las manos, y con los pies libres daré una patada a la caja donde te encierro. Tu música saldrá para siempre.